Andragogía, el Aprendizaje de los Adultos

Malcom S. Knowles (1870), considerado como el padre de la andragogía en Estados Unidos de América debido a que experimento cambios radicales en EUA como: la influencia masiva de inmigrantes, guerras, la depresión económica, oleadas de avances, la predominación del trabajador capacitado y el optimismo por el espíritu humano.

En 1870, trajo el concepto de andragogía a EUA donde declara que los adultos y los niños aprenden de distinta manera. Bloomfield (1986), con un punto similar al de Knowles, sostiene que la andragogía es la idea más popular de la educación y capacitación para adultos. La postura de esta ofrece principios fundamentales de aprendizaje del adulto que permiten diseñar y guiar el proceso de la docencia de manera más eficaz.

El concepto de andragogía no es tan popular como lo es el de pedagogía, que a simple vista se sabe que son conceptos distintos y en algún momento comparten algunas semejanzas, no es tan común encontrar líneas de educación para formar profesionales en andragogía, esto se debe a que el termino no tiene mucho tiempo que se utilizó y que sin duda no se existen tatas investigaciones de campo acerca de tal concepto.

Agrandes rasgos, se sabe que la pedagogía deriva del lenguaje griego donde su significado refiere al arte de educar al niño, por lo que andragogía comparte sus mismas raíces pero a diferencia que ésta, se encarga de la instrucción para adultos. Otra más es la que expresan los autores acerca de cómo se desenvuelven en la práctica;

“El pedagogo, al percibir los supuesto pedagógicos como los únicos reales, insistirán en que los alumnos dependan del profesor. Por otra parte, el andragogo, al percibir el movimiento que apoya los supuestos andragogos como meta deseable, ara todo lo posible por que los aprendices asuman una responsabilidad mayor acerca d su propio aprendizaje”.

Ala pedagogía se le conoce como una ideología mientras que a la andragogía se le distingue por ser un supuesto de sistemas alternos debido a que muchas de sus investigaciones así lo mencionan, cabe de mencionar que por tradición, Knowles comenta que se sabe más sobre el aprendizaje de los animales que sobre el de los niños, y se conoce mucho más sobre el aprendizaje de los niños que el de los adultos, supone que tal vez se deba a que el estudio del aprendizaje se originó con la experimentación de los animales, para posteriormente continuar en la experimentación con niños, el echo esta que muchas teorías del aprendizaje derivan del estudio de los animales y de los niños, siendo estas antecedentes de la misma andragogía.

La enseñanza autoritaria, los exámenes que imposibilitan el pensamiento original y las formulas pedagógicas rígidas así como los estándares curriculares, no tienen lugar en la educación para adultos, e incluso diversas investigaciones coinciden que la andragogía genera mejores resultados que la pedagogía. Pero no se trata de ver cuál es mejor que otra, ni de compararlas, si no de apreciar y saber distinguir para que nacieron cada una de ellas y así, ponerlas en práctica en sus ámbitos adecuados, pues no todo dependerá de estas teorías, sino más bien, del agente que se encargue de ejecutarlas en práctica, será él, quien entonces, goce de las bondades siempre y cuando las empleé como tales y para lo que son.

Holton III y Swanson comentan que los aprendices adultos son aquellos donde sus aspiraciones intelectuales desean no ser víctimas de manipulación por requisitos inflexibles e intransigentes de instituciones de aprendizaje autoritarias y convencionales.

Una persona, a cualquier edad de su vida, siempre estará ingiriendo conocimiento, ya sea de manera consciente o inconsciente, pero la educación para adultos de manera formal, comienza cuando esta persona le surge algún interés en particular por aprender algo que le ayudara a superarse así mismo, o bien, le servirá para algún fin que le inquiete. Liderman (1926) argumenta que el alumno adulto no puede comenzar a estudiar “temas” con la esperanza de que algún día utilice esta información, por el contrario, comienza por prestar atención en las situaciones en las que se encuentra y a los obstáculos que debe superar para su propia realización[2]. Esto coincide con Knowles (1975) al decir que los adultos solo tienen la disposición para aprender cuando necesitan saber y se crean capaces de aprenderlo, con el propósito de enfrentar las situaciones de la vida real.

Ben M. Cherrington, jefe de la División de Relaciones Culturales, Departamento de Estados Unidos de América, hace diferenciar que existen dos tipos de educación para adultos, la autoritaria y la democrática comentando lo siguiente, “la educación para adultos autoritaria está marcada por el régimen que demanda obedecía a unas pautas de conducta establecidas por la autoridad. Se espera que el comportamiento sea predecible, uniforme. La educación de adultos democrática emplea el método de actividades autodirigidas, con libertad de elección de temas y de determinación de resultados. La espontaneidad es bien recibida. La conducta puede predecir con certeza y, por tanto, no está uniformada. El pensamiento individual y critico es a mejor descripción del método democrático y es aquí donde el abismo entre sistema democrático y autoritario es aún mayor”.

Con esto se comprende el gran peso que el sistema deja caer sobre los docentes, auto creándoles un ambiente en donde el mismo sistema sea capaz de seguir controlando las actividades que se establezcan, y no solo de controlarlas, si no, de imponerlas, manteniendo el control de la obediencia de manera uniforme, evitando la autonomía de la propia escuela.

Varias investigaciones coinciden en que los adultos aprenden de mejor manera en ambientes informales, cómodos, flexibles y apacibles, donde el estudiantes tuviera la oportunidad de enriquecerse solo con lo que le será útil aprovechando su experiencia de vida misma que se cataloga como el recurso más enriquecedor que posee un adulto, aunque esta en ocasiones pueda manifestarse como una barrera que le impide al aprendiz abrirse a nuevos conocimientos como lo menciona Knowles.

“El hecho de tener más experiencia también tiene algunos efectos negativos. Conforme acumulamos experiencias, tenemos a formal hábitos mentales, tendencias y perjuicios, que cierran a nuestra mente a las ideas nuevas, percepciones frescas y otras formas de pensar”.

Durante la primera mitad del siglo XX, John Dewey fue quien más influencia tuvo en el ámbito de las experiencias en el adulto, comentando que, el problema central de la educación basada en la experiencia es seleccionar las experiencias del presente que persisten fructuosa y creativamente en las experiencias posteriores. A la preparación para el futuro más o menos remoto se le oponen las oportunidades de la vida del presente; a los objetivos y materiales estáticos se le opone el conocimiento de un mundo cambiante.

Por lo tanto, una de las ideas más difundidas por la andragogía, es que los adultos desean tener el control de su aprendizaje con base a sus metas personales, y que, como resultado, el aprendizaje será mayor. Los adultos deben de crear y poner en práctica su propio aprendizaje bajo sus necesidades, en el contexto educativo institucional, los problemas o necesidades de una escuela son por ende, también el docente y director.

Nuevas perspectivas en el estudio de la andragogía

Las nuevas perspectivas han venido surgiendo de la investigación y de las teorías en diferentes disciplinas. A continuación se mencionaran seis principios con los que se relaciona la andragogía, mismas que un instructor de alumnos adultos debe de llevar al a practica para un mejor desempeño e interés por parte del aprendiz.

1- La necesidad de conocer al alumno

Los alumnos deben participar en un proceso de planeación en el que colaboren con su aprendizaje, una de las características distintivas es el control compartido les la planificación y facilitación del programa haciéndolo más eficaz. Hacer participar a los adultos como colaboradores satisface la necesidad de conocer y estimular su aprendizaje.

2- El aprendizaje auto dirigido

Los educadores de adultos insisten en que todo aprendizaje debe tener como meta aumentar la autonomía personal del aprendiz. Pero también es cierto que demasiado aprendizaje autodirigido puede ser un problema también, por ejemplo, un alumno que tiene experiencias en algún tema en específico se frustrara muy fácil en situaciones muy controladas. A la inversa, es muy probable que un alumno se intimide con poca experiencia en algún tema propiciando pocas destrezas en el aprendizaje autodirigido, es por ello que el profesor tiene que aprender a estructurar según sea el caso de los alumnos.

3- Experiencia previa del alumno

El papel de la experiencia de los alumnos adultos reside cada vez más atención, se ha puesto en noción que la experiencia crea predisposiciones que tienen grandes efectos en el aprendizaje. A partir de ella el alumno deberá comenzar a ingerir nuevo conocimiento, o como lo denomino Kurt Lewin “etapa de descongelamiento”, donde no se puede esperar que el alumno cambie a menos que primero se ponga atención en sus convicciones e ideas.

4- Disposición para prender

Esta etapa parte de la anterior, en el momento en que un adulto se siente listo para aprender cuando su situación genera una necesidad de saber. Cuanto más anticipen y mejor atiendan los profesionales del aprendizaje de adultos la situación existencial de sus alumnos y su disposición para aprender, será más eficaces.

5- Orientación al aprendizaje: solución de problemas

Los adultos prefieren una orientación de solución de problemas en vez del aprendizaje centrado en un tema. Además, se aprende mejor cuando la información se presenta en el contexto de la vida cotidiana. Como resultado, el método de aprendizaje por experiencia se ha asentado en la práctica del aprendizaje de adultos.

6- Motivación para aprender

La motivación emerge cuando reciben un aprendizaje que ayudara a dar solución a diferentes problemas según sea el caso, Wlodowski (1985) da una explicación acerca de la motivación en cuatro factores:

- Éxito: los adultos quieren ser alumnos exitosos

- Voluntad: los adultos quieren sentir que ejercen su voluntad en su aprendizaje

- Valor: los adultos desean aprender algo de valor para ellos

- Gozo: los adultos desean experimentar el aprendizaje como algo placentero

Este principio establece que los motivadores más poderosos son los internos: por ejemplo, la calidad de vida, la satisfacción y la autoestima. Es por ello que el aprendizaje que más aprecien los alumnos adultos será el que más valor personal tenga para ellos.

Los contratos de aprendizaje

“El contrato de aprendizaje es un modelo para puntualizar los objetivos del aprendizaje en la experiencia de campo, de hacerlos claros y explícitos, tanto para el alumno como para el supervisor de campo”. En este caso el docente.

Paso 1: diagnosticar las necesidades de aprendizaje

Una necesidad de aprendizaje es una brecha entre el punto actual al punto en donde se desea llegar, considerando un grupo particular de competencias. Posiblemente existan ciertas necesidades de aprendizaje como resultado de alguna evaluación ya sea personal, grupal o institucional dependiendo de las competencias que marcan algunos protocolos o estándares.

Paso 2: especificación de objetivos de aprendizaje

A cada necesidad que se diagnosticó en el paso uno, se le debe de asignar uno o varios objetivos, estos deberán ser claros y que describan lo que se aprenderá y lo que se ara.

Paso 3: especificación de estrategias y los recursos de aprendizaje

Habrá que identificar los recursos (materiales y humanos) que se plantean utilizar en la experiencia de campo y las estrategias (técnicas, herramientas) que se usaran. Es decir, cada objetivo deberá de contar con una lista de recursos y otra de estrategias.

Paso 4: especificar las pruebas de los logros

También se hará una lista que declare las “evidencias del cumplimiento de objetivos”, así mismo se deben de describir que pruebas se van a considerar.

Paso 5: especificación de cómo se valdrán las pruebas

Para cada objetivo se deben de especificar qué criterios se proponen para juzgar las pruebas, los criterios variaran según el objetivo, al mismo tiempo se deben de indicar los medios para juzgar las pruebas de acuerdo a los criterios, es impórtate que se involucren a personas como medios para este rol.

Paso 6: revisar el contrato con asesores

No es otra cosa más que el compartir el trabajo para comprar con otro y así mismo este pueda recibir críticas que le ayuden a obtener beneficios óptimos.

Paso 7: cumplir con el contrato

Hacer lo que se especuló en el contrato teniendo presente que puede ser víctima de la necesidad de hacer cambios o modificaciones dentro de él.

Paso 8: evaluación del aprendizaje

Tras completar el contrato, se deben de verificar lo que se aprendió y si se lograron los objetivos, la manera más simple de hacer esto es involucrar a los asesores que se involucraron en el paso 5 y 6 para que examinen las evidencias dando un juicio y una valoración sobre el trabajo que se realizó.

En realidad la evaluación se debe de llevar no solo al principio y al final, si no durante todo el proceso del contrato, en pequeños intervalos de tiempo para ir observando los resultados y de acuerdo a ellos generar cambios para bien si se requieren. Este tipo de procesos a mediano y largo plazo son ideales para instituciones educativas donde se requiere corregir errores, hacer modificaciones y buscar una óptima actuación para el aprendizaje, generando la autonomía en todos sus involucrados.

El modelo andragógico es un sistema de elementos que pueden adoptarse o adaptarse en conjunto o por partes. No es una ideología que deba aplicarse en su totalidad y sin modificación alguna. De hecho, un rasgo esencial de la andragogía es la flexibilidad.